Juan 21:4-7
“Acércate” dice Jesús. “Más cerca” dice el Señor. Este mes celebramos el gran sacrificio de Jesús, el regalo tan precioso que Dios nos dio, que por amor al mundo dio a Su hijo Jesucristo para que todo aquel que en el crea no se pierda mas tenga vida eterna (Juan 3:16). Jesús mismo nos amo, y vino a cumplir Su misión redentora. Maravilloso es saber que El considero una relación con nosotros, nosotros los viles pecadores, como una cosa por cual dar Su Vida.
Hermanos, acerquémonos. Acerquémonos a Aquel que nos ama tanto. Igual que Pedro, no importándole qué pensarían las personas alrededor de él, se echó al agua para llegar más cerca de nuestro bello Señor, dejemos atrás todo lo que nos estorba en nuestra relación con Dios y acerquémonos. Acerquémonos a Aquel que Su Hijo dio, a Aquel que nos consuela, a Aquel que dio Su gloria, a Aquel que dio Su vida, a Aquel que sufrió tanto por nuestra culpa. Acerquémonos a Aquel que es tan dulce. Aquel que suple todas nuestras necesidades. Aquel que se preocupa de darnos de comer. Al que nos perdona cada pecado y cada insensatez. Acerquémonos más cerca a Su trono, como dice Hebreos 4:16: “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” Deseemos ver más de Él y conocerlo más. El es Jesús, nuestro mejor amigo, Fiel y Verdadero, El Principio y el Fin, Pan de Vida, Dios del universo, omnipotente y eterno. Vayamos más cerca de Jesús, quien tan dulcemente preparó el desayuno para Sus discípulos cansados (Juan 21).
Hermanos, no tomemos esta época como un
ritual. Piense en lo que El hizo por usted. En Quien El es. El es
indescriptible. Si no lo conoce muy bien, pídale que le dé deseos de
conocerlo. Pídale que le tome de la mano, y le traiga más cerca a Él. Lo
más grande de la vida es conocer a Jesucristo, y ser conocido por El.
Ministerio Josue Yrion
